Terapias No Farmacológicas y dolor crónico: un proyecto premiado por la Cátedra de Humanización de VIU

La segunda edición de los Premios de la Cátedra de Humanización de la Asistencia Sanitaria de VIU, Fundación ASISA y Proyecto HUCI, cierra este 15 de marzo el plazo de postulación para una de sus categorías, la de Mejor Intervención Aplicada en el Contexto Sanitario. Se trata de un premio que se entrega durante las jornadas que celebra la cátedra, y que en la edición anterior distinguió el trabajo de un equipo de profesionales de Sevilla dirigido por la Dra. Mª Victoria Ruíz Romero, quienes desarrollaron un proyecto titulado Manejo del Dolor Crónico No Oncológico con Terapias No Farmacológicas (TnoF).

Para conocer más sobre el proyecto, los detalles de su desarrollo y los planes futuros de desarrollo de éste. Nos pusimos en contacto con la Dra. Mª Victoria Ruíz Romero, quien además de seguir con su trabajo en el Hospital San Juan de Dios del Aljarafe, de Sevilla, recientemente se ha integrado en el claustro de la Facultad de Ciencias de la Salud de VIU.

¿Nos puedes contar un poco sobre ti?

Soy médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, doctora en Medicina, Máster en Gestión de la Calidad y en Bioestadística Aplicada en Ciencias de la Salud y Experto en Coach Profesional.

Trabajo como Responsable de Calidad e Investigación en el Hospital San Juan de Dios del Aljarafe, situado en Bormujos, Sevilla, desde el año 2003.

¿En qué consiste el proyecto con el que ganaste el Premio a la Mejor Intervención Aplicada en el Contexto Sanitario?

La prevalencia de dolor crónico en España es del 17%. El dolor crónico es una experiencia compleja y multidimensional, su elevada prevalencia, a pesar de los fármacos y la alta tecnología empleados, lo convierten en un problema de salud pública con alto consumo de recursos sanitarios y gran impacto psicosocial en la vida del paciente.

En la actualidad, se recomienda un enfoque más integral, interdisciplinar, con terapias farmacológicas y no-farmacológicas, otorgando un papel protagonista a los pacientes en el control del dolor y la mejora de su propia salud.

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La Dra. Mª Victoria Ruíz, con el Premio de la Cátedra de Humanización

Es por ello por lo que, desde 2016, nos planteamos desarrollar un taller multicomponente con el fin de abordar el manejo del dolor crónico no oncológico, desde una perspectiva más holística, utilizando terapias no farmacológicas.

En 2021, rediseñamos el taller para adecuarlo a las necesidades y expectativas de los pacientes y, a partir noviembre de 2021, cerramos el contenido, estructura y metodología de manera que, podemos comparar los resultados de los pacientes de las sucesivas ediciones.

El taller consta de 5 sesiones (1/semana) de 3,5 horas de duración cada una. La metodología es participativa y experimental, integra técnicas como la analgesia mental, relajación, atención plena, terapia cognitiva conductual, terapia de aceptación y compromiso, afirmaciones, perdón, promoción de hábitos saludables.

Para este premio hemos presentado la evaluación de la efectividad del taller con una metodología mixta (cuantitativa y cualitativa). Por un lado, hemos realizado un estudio cuasi-experimental intragrupo “antes-después”, comparando dolor, bienestar, uso de fármacos, calidad de vida y autoestima antes de iniciar el taller y al finalizar, y, por otro lado, un enfoque cualitativo, para profundizar en las experiencias de los pacientes.

¿Qué son las Terapias No Farmacológicas?

Las Terapias No Farmacológicas incluyen técnicas mente-cuerpo (meditación, atención plena), terapias psicológicas como la terapia cognitiva conductual y terapia de aceptación y compromiso; la promoción de hábitos saludables que sabemos que mejoran el dolor, y otras técnicas y herramientas que mejoran el autoconcepto (autoafirmaciones ante el espejo), la autoestima (fomentar el amor propio y el autocuidado), el bienestar emocional (identificación de pensamientos y creencias limitantes para reconducirlas hacia otras potenciadoras y el trabajo del perdón hacia los demás y hacia mí mismo).

También realizamos explicaciones de cómo es el dolor crónico, cómo afecta tanto a nivel físico como mental, emocional y espiritual, de manera que, desde la consciencia, el paciente conoce mejor cómo le afecta y, con las herramientas presentadas, aprende a controlarlo, usando de manera más racional los fármacos o incluso dejando de consumirlos.

Entre las meditaciones hemos incorporado una específicamente diseñada para controlar el dolor que hemos llamado “analgesia mental”.

El paciente pasa de ser un sujeto pasivo que se abandona en manos de los distintos profesionales del sistema sanitario, a tomar decisiones de manera consciente para favorecer su propia curación.

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La Dra. Ruíz Romero junto al equipo con el que desarrolla el taller

¿Tienes intención de seguir trabajando en la línea del proyecto/intervención con que ganaste?

Por supuesto, de hecho, sigo en ello. Tenemos muchos proyectos.

El 15 de marzo impartiremos un curso para formar a profesionales de Atención Primaria de nuestro Distrito Sanitario, para extender el taller progresivamente a este ámbito asistencial.

Hemos enviado un artículo con la evaluación cuantitativa del taller y está en proceso editorial.

Estamos trabajando en otros tres estudios más: uno para ver el efecto del taller a medio plazo (a los 3 meses); otro para evaluar el impacto en el uso de recursos sanitarios (asistencia en urgencias fundamentalmente y consumo de fármacos analgésicos y antidepresivos) y otro más fenomenológico a través de entrevistas en profundidad.

Además, hemos realizado ya una primera reunión con un grupo de psicólogos de VIU interesados en colaborar en nuestro proyecto y tenemos previsto definir las líneas concretas en las que trabajaremos.

También presentaremos el taller en el próximo Congreso de la Sociedad Española del Dolor, desde una mesa en la que se hablará de las Terapias No Farmacológicas para el manejo del dolor crónico no oncológico.

¿Qué significó ganar el premio de la Cátedra de Humanización para ti y tu equipo?

Fue muy motivador para nosotros. Ha supuesto un reconocimiento a nivel internacional de nuestro proyecto y, el hecho de que se haya elegido como premiado desde una Cátedra de Humanización lo hace aún más especial para nosotros, ya que este taller pretende hacer más amable y más llevadera la vida de estos pacientes que tanto sufrimiento llevan a sus espaldas, tanto por el dolor físico como por el emocional.

Las docentes de este taller creemos firmemente que el paciente tiene la posibilidad de mejorar su salud y su calidad de vida, sólo necesita que le ayudemos a descubrirlo y que le acompañemos en su proceso de cambio facilitándoles herramientas y apoyo para que les resulte más fácil conseguirlo.

Ponemos a disposición de estos pacientes nuestra profesionalidad y, por supuesto, todo nuestro cariño y dedicación y, ver cómo mejoran, así como el agradecimiento que ellos nos devuelven a nosotros, nos compensa con creces el tiempo y el esfuerzo dedicado.